¡Oh Inexplorado y Raíz de Dios! Yo me entrego por hijo tuyo, y en honor y paraíso de tu pureza, te ofrezco mi alma y cuerpo, mis potencias y sentidos y te suplico me alcances la gracia de no cometer de ningún modo pecado alguno. A más. Igualmente encontrarás https://eternalbookmarks.com/story17593760/los-principios-b%C3%A1sicos-de-oracion-a-san-miguel-arcangel